Primer viaje del Card. Ravasi a México

Monterrey, Puebla y Ciudad de México. Mayo 2013

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El Cardenal Ravasi El Cardenal Ravasi

El grande poeta alemán Goethe amonestaba: si quieres conocer el espíritu de un hombre, debes conocer su tierra. Del 6 al 9 de mayo el presidente del consejo Pontificio de la Cultura viajó a México, para animar la pastoral de la cultura con distintas actividades realizadas en las ciudades de Monterrey, Puebla y México.

La primera actividad del viaje inició el 6 de mayo en Monterrey, con la conferencia: Fe y cultura en nuestros tiempos, conferencia sustentada en el auditorio de la Universidad de Monterrey, con motivo de los 15 años de la cátedra de Arte Sacro. El Cardenal tejió su conferencio en torno algunos conceptos fundamentales de la relación entre fe y cultura. Fe y cultura son dos categorías fundamentales en la historia de la humanidad. Sin embargo, el contenido  de cada una de ellas se ha prestado y se presta a no ser comprendido fácil ni cabalmente.

Para comenzar, el Cardenal Ravasi hizo una distinción entre la fe y la religión: fe y religión no se identifican. La fe involucra al ser humano en una opción total, entera, y tiene una doble dimensión: vertical, hacia lo Alto, hacia Dios y horizontal, hacia la humanidad a la que se pertenece, hacia los hermanos. La religión, en cambio, está compuesta de representaciones estructurales y se presta a las ambigüedades y a la corrupción.   Después expuso el significado actual del concepto de cultura, que se ha convertido en una categoría transversal, con un significado antropológico.  En la base misma de todo hecho de cultura y de la religión cristiana está la palabra. Ella es la epifanía de lo humano, el vehículo privilegiado de la comunicación. Ella está al principio. La palabra es frágil, de duración breve en su expresión, pero tiene eficacia creadora y de larga duración. La fuerza de la palabra se extiende sobre el mundo y la historia humana. En la actualidad asistimos a una mutación radical de la palabra y de su capacidad comunicadora. Citando al poeta mexicano, premio Nobel, Octavio Paz, presentó así este riesgo: “un pueblo comienza a corromperse cuando se corrompe la gramática.” El reto de esta mutación lo constituye el lenguaje virtual. Se trata de un “giro copernicano” similar al de Galileo, que sustituyó a la tierra como centro por el sol.  

Los forjadores de cultura son creyentes y no creyentes, llamados a dialogar. No se trata de oposiciones sino de profundizar sobre temáticas comunes: la vida, la muerte, la legalidad, el amor, la paz, la custodia de la creación, la verdad, la persona, la libertad, las relaciones entre transcendencia e inmanencia y el tema persistente de la relación entre la fe y la ciencia, buscando ambos el bien del hombre y de la sociedad.

Finalmente, el Cardenal tocó el tema de la relación entre fe y arte: La belleza, recuerda y llama al hombre a su destino último. Pues el arte “golpea” a la manera de la lectura de los evangelios que incide en la persona. “el arte está hecho para turbar, la ciencia para asegurar.” El arte es como la hermana amada de la fe. El arte y la fe deben de nuevo encontrarse.

De Monterrey viajo a Puebla de los Ángeles, donde obtuvo su primer doctorado americano, por la UPAEP, como parte del 40 aniversario de la fundación de la Universidad Popular Autónoma de Puebla. La Lectio Magistralis para su Doctorado honoris causa llevó por título: Repensar la Universidad desde la perspectiva del diálogo fe-cultura. Por la tarde sostuvo un diálogo con  sacerdotes, consagrados y laicos comprometidos en la pastoral, en el Seminario Palafoxiano acerca de las coordenadas para una pastoral de la cultura.

Recuperar la centralidad de la persona humana en la emergencia educativa en México. La anticultura del narcotráfico y el crimen organizado, que ha borrado todos los valores de las relaciones humanas sociales y culturales, podrá ser combatida no sólo como lo hace el Estado a nivel policía, sino a través de la educación, con la formación de un nuevo modelo humano que restituya la fortaleza de la sociedad. "El crimen organizado, el narcotráfico y las mafias no son cultura, son una anticultura", sostuvo el Cardenal Ravasi en la presentación y diálogo del documento de la Conferencia del Episcopado Mexicano "Educar para una nueva sociedad" y el “Diálogo Laicidad y Trascendencia en México” que se realizó en el Museo Soumaya, en la tercera etapa del viaje, en la Ciudad de México, el 8 de mayo. Para combatir la anticultura que plantea el crimen organizado, un elemento decisivo es la educación, la formación de un nuevo modelo humano. Por ello, el Cardenal Ravasi invito a inculcar en los jóvenes que las mafias, el crimen organizado, el narcotráfico, no son formas religiosas a pesar de que usen símbolos religiosos como la santa muerte: "No son religiones, son en efecto un elemento blasfemo".

Otro importante argumento que tocó fue la relación entre Estado y la Iglesia. Estas dos instituciones están y deben de estar separadas. Cada uno tiene su autonomía, pero la Iglesia y la sociedad, en cambio, están unidas, porque la Iglesia está hecha de personas que pertenecen a la sociedad y, por lo tanto, están presentes en la sociedad con su propia identidad. El Estado, agregó, debe reconocer que en la sociedad hay una presencia religiosa, como en México, que es un componente muy importante histórico y actual.

Por la tarde, creyentes y no creyentes se interrogaron acerca de la ausencia de Dios en la cultura, la laicidad de un Estado y la democracia sin ideales, pero coincidieron en que es a través del diálogo como se podrán dirimir las cuestiones fundamentales del próximo siglo. El profesor e investigador de la Universidad Michoacana de San Nicolás Hidalgo, Eduardo González Di Piero y el Investigador del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM, Guillermo Hurtado; la Dra. Virginia Aspe, de la Facultad de Filosofía de la Universidad Panamericana; el Dr. Carlos Ornelas Investigador de la UNAM; el director del CISAV, Rodrigo Guerra; el poeta y filósofo, Julio Hubbard y el Dr. Jorge Traslosheros del Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM, dialogaron con el Cardenal Gianfranco Ravasi. Franqueados por la famosa escultura de bronce de Augusto Rodin "El Pensador" y el Biombo "Las Cuatro Partes del Mundo" de Juan Correa, participaron en el II Encuentro Fe y Cultura: "Laicidad y Trascendencia", que se enmarca dentro del el Atrio de los Gentiles. El doctor Guillermo Hurtado del Instituto de Investigaciones Filosóficas de la UNAM, consideró que la propuesta del Vaticano del Atrio de los Gentiles, es el terreno donde se podrá dirimir muchas de las cuestiones de la civilización occidental dentro de los próximos años.  "No sabe dialogar quien se considera dueño absoluto de la verdad, que es sólo su verdad. Quien no escucha a los otros, se endiosa y por ello se hace una persona odiosa", concluyó el Obispo Felipe Arizmendi Esquivel, responsable de la Comisión Pastoral de Cultura de la Conferencia del Episcopado Mexicano.

De entre todas las actividades realizadas en México, tiene un significado especial los encuentros con alumnos y profesores de la UNAM, el día 9 de mayo, organizados por el Prof. Guillermo Hurtado. En primer lugar, la lección: La literatura del Antiguos Cercano Oriente. Las grandes preguntas sobre el ser y el existir, ante profesores y alumnos del la Facultad de Letras Clásicas y del Instituto de Investigaciones Filológicas de la UNAM, en el Centro Universitario Cultural de los Dominicos, junto a Ciudad Universitaria y  por la tarde, el encuentro privado con investigadores de la UNAM y otras universidades e instituciones mexicanas que se llevó a cabo en el Instituto de Investigaciones Filosóficas. Este rico debate permitió identificar algunos de los elementos y condiciones fundamentales para la constitución de un Atrio permanente en México, como son: la necesidad de un lenguaje común, el componente afectivo y pasional que muchas veces condiciona el diálogo, la urgencia de un método y una agenda establecida en común para poder avanzar.

Muy importante fue el encuentro con la prensa mexicana, en las distintas conferencias y entrevistas, sobre todo, la entrevista realizada por el periodista Joaquín López Dóriga y presentada en cadena nacional por TELEVISA.

El 10 de mayo, antes de regresar a Roma, en la Nunciatura en México, tuvo un muy cordial encuentro con el Presidente de Canaculta, el Dr. Rafael Tovar y de Teresa.